Desde CCOO-UGR, hemos recibido multitud de llamadas y consultas del PTGAS de la UGR trasladando el malestar general por el endurecimiento, de forma unilateral por parte del Equipo de Gerencia, en los procesos de Promoción Interna. No se han considerado los escritos remitidos por el personal, se desatiende la opinión de los legítimos representantes presentes en la negociación… Nuestro Rector, ante las concentraciones desarrolladas en los últimos Consejos de Gobierno, hace mención al talante negociador y consecución de acuerdos, sin embargo, no cabe mención a dicho talante cuando la/s negociación/es pasa/n por la aceptación (sí o sí) de las decisiones/borradores remitidos por su Equipo. Por ello, desde CCOO-UGR deseamos trasladar:
- Los procesos de promoción interna suponen un cambio de grupo o subgrupo manteniendo el mismo puesto de trabajo (el personal ya ha demostrado su idoneidad en convocatoria pública y ahora debe demostrar que dispone de las competencias, conocimiento y destrezas para desarrollar su carrera profesional en un grupo o subgrupo superior) en ningún caso pueden, ni deben, equipararse a las convocatorias de acceso libre (evaluar la idoneidad del/la candidato/a que formará parte de un puesto en la UGR).
- Podemos tomar como referencia El Acuerdo de Promoción Interna de la AGE sobre criterios generales para la selección de personal vía Promoción Interna firmado por la AGE y CCOO (Ver AQUÍ) , donde se marcan los criterios por los que deben regirse los procesos de promoción interna modernos, del siglo XXI:
- Dotar de homogeneidad y unidad de actuación a las distintas convocatorias de promoción interna.
Primer criterio que no se cumple en la UGR. Se da la paradoja que en la actual Promoción interna (2024), nos encontramos personal que promocionará con unos criterios «acordados» y personal al que se aplicará unos criterios distintos aprobados unilateralmente por el equipo de Gerencia. Obvia la Gerencia el programa electoral del Rector donde prometía la creación de una comisión técnica de asesoramiento y acompañamiento a los órganos de selección para:
» …garantizar la homogeneidad de los procesos.»
Esta homogeneidad se garantiza, entre otros, en mantener los criterios en la convocatoria y asignación de plazas de promoción Interna en los distintos sectores que integran la UGR, aplicando de una forma real los acuerdos de Baeza.
- Dentro de las Medidas inspiradoras de los procesos de promoción interna destacan:
- Elaboración de ejercicios dirigidos a la evaluación de conocimientos y de competencias, mediante la realización de cuestionarios, pruebas especialmente supuestos prácticos en formato tipo test con respuestas alternativas o razonadas.
Este criterio va en contra de la apuesta de la Gerencia de la UGR sobre la implantación de pruebas prácticas, donde es difícil de acotar la subjetividad del tribunal. Esto traslada el «poder de decisión» de quién promociona a grupo o subgrupo superior, a las personas responsables de cada servicio…. sabiendo el personal lo que puede suponer/significar esto en la UGR
- Revisión y reducción de los contenidos valorables en los procesos de promoción interna, para evitar que se exija, nuevamente, la demostración de conocimientos que ya han sido valorados en pruebas análogas de acceso al cuerpo, escala o categoría profesional desde el que se promociona.
Este criterio también va en contra de lo aprobado por la Gerencia de la UGR, donde se tiene que volver a demostrar conocimientos ya superados en el acceso o que se vienen demostrando a lo largo de la trayectoria laboral.
- Diseño de itinerarios formativos, con garantías de concurrencia y de realización por las empleadas y empleados públicos, que garanticen la exención de materias del proceso selectivo, por la evaluación y acreditación por parte de los gestores de la formación.
- Diseño de cursos que puedan servir, bien como elemento de valoración de los conocimientos y de las pruebas prácticas, bien como aprendizaje y experiencia habilitante para el desempeño de funciones y tareas de subgrupo o nivel superior.
Este criterio es obviado por la Gerencia de la UGR, ya que no tiene en cuenta la formación no reglada a la hora de la Promoción.
- Elaboración de ejercicios dirigidos a la evaluación de conocimientos y de competencias, mediante la realización de cuestionarios, pruebas especialmente supuestos prácticos en formato tipo test con respuestas alternativas o razonadas.
- Dotar de homogeneidad y unidad de actuación a las distintas convocatorias de promoción interna.
Por todo lo anteriormente expuesto, la mayoría del personal de la UGR nos ha transmitido que está en contra de los criterios aprobados por Gerencia para endurecer la promoción Interna.
Esperemos que Gerencia no continúe desoyendo a la plantilla y retome/recupere ese talante negociador, evitando sorprenderse cuando la plantilla manifieste su malestar con movilizaciones en contra de esta promoción interna.