Dice El País que las empleadas de limpieza de Castellón están en huelga por mejores salarios. Cuando se lee la noticia se ve que, en realidad, están luchando por cobrar el salario mínimo. Dentro de poco todas las limpiadoras de la UGR estarán en la misma situación:
En el Consejo de Gobierno y en el Claustro varios profesores y profesoras se han manifestado a favor de la privatización de la limpieza, argumentando que de esa forma la Universidad de Granada podrá contratar el personal técnico especializado que necesitan para su investigación.
Aunque tenemos serias dudas de que lo uno sea necesario para lo otro, no es ése ahora el debate, sino las consecuencias de esa decisión.
Quienes apoyan la privatización de la limpieza están apoyando que en breve todas las personas que limpien nuestras aulas, nuestros laboratorios, y todas las demás instalaciones se encuentren en unas condiciones laborales como las que vemos en este artículo, cobrando incluso menos que el salario mínimo.
Allá cada uno y cada una con su conciencia.