Por Sección sindical de CCOO en la Universidad de Granada ®
La renovación de la plantilla de profesorado está en peligro: hemos pasado de tener casi 300 profesores y profesoras en formación a tener 170, lo que provoca una sobrecarga docente en algunas áreas y que otras estén en vías de desaparición.
La promoción de la plantilla está absolutamente paralizada: sólo se han convocado 15 plazas de titularidad y cátedra en 2013 y 2014 (años afectados por la tasa de reposición del 10%), lo que deja sin posibilidad de promoción a numerosas personas a pesar de haber obtenido la acreditación correspondiente.
No se ha convocado ninguna plaza de profesorado contratado doctor por lo que el profesorado ayudante doctor que ha obtenido la acreditación correspondiente no ha podido promocionar a esa figura.
Ha aumentado la precariedad: más de 30 ayudantes doctores que habían obtenido la acreditación de contratado doctor se han visto obligados a aceptar un contrato interino (profesora o profesor contratado doctor interino) en lugar de promocionar a un contrato indefinido.
El profesorado sustituto interino ha pasado de unas 70 personas a más del doble, lo que supone la sustitución de contratos de ayudante y ayudante doctor, con salarios y condiciones mejores, por contratos con bajos salarios y absoluta precariedad.
Las medidas anunciadas
por la Junta de Andalucía y el Gobierno central
Para el año 2015 ambas instituciones han anunciado que relajarán sus restricciones, permitiendo la contratación de profesorado ayudante por un lado, aumentando la tasa de reposición por el otro.
Son indudablemente dos buenas noticias pero aún muy insuficientes para hacer frente a la pérdida de profesorado que están sufriendo las universidades en general, la Universidad de Granada en particular.
La tasa de reposición del 50 % no compensa la pérdida de profesorado. De partida supone una pérdida del 50% del profesorado funcionario que se jubila, fallece o causa baja por cualquier otra razón, que no es sustituido.
Además, sólo compensa la pérdida de plantilla funcionaria producida en 2014, sin tener en cuenta todo el profesorado funcionario que causó baja durante los cursos anteriores.
Tampoco tiene en cuenta las bajas que se producen entre el profesorado con contrato laboral.
Sigue sin permitirse la promoción interna. El resto del personal al servicio de todas las administraciones públicas no ha tenido ninguna limitación a su promoción interna durante los pasados años en contraposición a lo que ha venido sufriendo el profesorado universitario. Esta discriminación no se subsana en las nuevas medidas del Gobierno central.
De hecho, esto supone que las pocas plazas que se pueden convocar cada año sean destinadas a la promoción de su propio profesorado y no permitan la incorporación de nuevo personal. Esto supone, de hecho, que la pérdida de plantilla entre el profesorado universitario se vea multiplicada frente a otros colectivos.
Las nuevas plazas de profesorado ayudante doctor no compensan la pérdida de profesorado. El anuncio por la Junta de Andalucía de la convocatoria de unas 200 plazas de profesorado ayudante doctor para todas las universidades andaluzas resulta claramente insuficiente cuando sólo la Universidad de Granada ha perdido más de 100 plazas.
En definitiva, la Universidad de Granada ha perdido entre 2012 y 2014 más de 100 profesores y profesoras. Ni las medidas de la Junta, ni las del Gobierno central son suficientes para compensar esta pérdida de plantilla ni las necesidades de promoción existentes.